Una intensa actividad que comenzó con el Coro “Villa de Zújar”, que intervino en la misa celebrada en la Iglesia Parroquial a las 12.00, donde exhibió su conocido repertorio.
Iglesia de Zújar. Imagen del pasado domingo hacia las 3 de la tarde
Sin duda, el acto central fue el excelente concierto ofrecido por la Banda de Música, la joya de la asociación. Concierto que era muy esperado ya que el programado para agosto fue suspendido debido a la lluvia. El público de Zújar estaba expectante, con bastantes ganas, pues no había tenido la oportunidad de escuchar un concierto de la Banda desde el último sábado de abril, con motivo de las Fiestas de Moros y Cristianos.
Una imagen inusual: los componentes de la banda preparándose para el concierto en la sacristía de la Iglesia
El concierto se celebró, como es costumbre, en la Iglesia Parroquial, lugar donde la Banda debe luchar contra las dificultades del sonido, con bastante reverberación. Quizás, algún día, una de las históricas aspiraciones de Zújar se haga realidad y esta localidad, con un público entregado con pasión a la música y al teatro, cuente con un espacio escénico adecuado.
Antes del concierto, el presidente de la Asociación, Gregorio Rodríguez, presentó a los nuevos componentes de la banda (Estrella en la flauta y Alberto en el trombón) e hizo mención a los nuevos trajes, de corte sobrio, estrenados en Murcia, el 9 de octubre, acompañando la procesión de la Hermandad de la Virgen del Rosario. Después, señaló el esfuerzo que los componentes de la banda habían realizado durante las últimas semanas para prepararlo, haciendo mención expresa a la gran calidad que estaba alcanzando, que se sumaba al éxito de la formación musical como objetivo estratégico de la asociación. No en vano, durante este curso hay unos 50 niños y niñas en la Escuela de Música de la Asociación. Como colofón a su presentación, informó a los presentes que el año 2010 se cumplía el 20º Aniversario de la Banda de música y del asociacionismo musical en Zújar y que, por tal motivo, se iban a celebrar una serie de actividades especiales (conciertos, exposiciones, publicaciones, etc) que culminarían con el concierto de Santa Cecilia de 2010 donde se estrenará una obra para banda y coro que está componiendo Marisol. La verdad es que se avecina un suculento atracón de música para el año que viene.....
Pero cuando el director, Ramón José García, levantó la batuta para iniciar el concierto, se podía respirar la expectación del público. Pronto los espectadores, que habían abarrotado la nave de la iglesia por completo (algunos tuvieron que quedarse de pie) quedaron enganchados. Dos pasadobles iniciaron la velada como si de un aperitivo se tratara. Para abrir boca, y atendiendo a una parte del público amante del pasadoble, fueron sonando “El torico de la cuerda” (de Luis Serrano Alarcón) y “La primitiva” (de Jef Penders). Seguidamente, una pieza ya conocida en Zújar, y muy querida, el “Tango for toreador” (de Chr. Snijders) sirvió como inflexión, como una transición hacia una nueva visión, explorando otros ambientes. La banda iba descubriendo un nuevo horizonte musical, cambiando el rumbo y demostrando que es una formación todoterreno, muy bien engrasada, que ha ido ganando consistencia con el tiempo de la mano de su joven director. El público pudo comprobar como la banda se recreaba en las sutilezas de “Ammerland” (de Jacob de Haan), se dejaba embriagar por los efectos de las "big band" americanas de “La Storia” (también de Jacob de Haan) o se dejaba viajar a los ritmos celtas de “Ireland: Of Lengend And Lore” (de Robert W. Smith), donde pudo comprobar con perplejidad el arduo trabajo de los distintos aires de esta composición, donde se sucedían los momentos brillantes de la mayoría de los instrumentos, como solistas, desde el oboe, la flauta, el clarinete o la trompeta hasta la percusión, tan importante en la música irlandesa.
Cuando ya parecía que se había llegado al éxtasis, el programa elevó aún más el climax de esta inolvidable velada con la interpretación de “El Quijote”, una fantasía sinfónica para narrador y banda compuesta por Ferrer Ferrán. Esta obra de una gran dificultad técnica, iba concatenando temas de distinto clima que iban envolviendo al narrador (Carlos Martí), quién iba leyendo fragmentos de la novela de Cervantes en una excelente simbiosis entre el texto y el ambiente musical. A pesar de que, en algunos momentos, debido a las dificultades del sonido, no se entendiera bien al narrador, el público disfrutó de lo lindo de un concierto espectacular que abre muchas expectativas para el futuro de esta formación.
Estamos de enhorabuena, y tenemos la suerte de disponer de una banda con un tremendo futuro, y eso es de agradecer.
Por cierto, la Banda de Música volverá a actuar el viernes que viene, día 27 de noviembre, en el teatro Ideal de Baza, en el marco de la gala de entrega de premios de la Asociación de Empresarios del Altiplano de Granada. Merece la pena acercarse a escuchar esta banda.
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